Chenoa presume de nuevo novio y de buenas amigas en las redes sociales.
La cantante mallorquina salió a cenar y además presentó oficialmente a su pareja.
Fiel a la naturalidad con la que se expresa en sus entrevistas y gestiona sus redes sociales, la cantante Chenoa no ha tenido que hacer grandes declaraciones o confirmar la noticia con publicaciones perfectamente diseñadas para ello a la hora de dejar patente que disfruta de un ilusionante noviazgo con el doctor Miguel Sánchez Encinas, con quien se le relacionó en un primer momento a finales del pasado diciembre y al que ahora ha tenido oportunidad de presentar a tres de sus mejores amigas.
Como se desprende de la última publicación de Instagram compartida por la exnovia de David Bisbal, la pareja disfrutó ayer lunes de una suculenta cena en Madrid junto a rostros tan conocidos como los de Gisela, Nuria Fergó y Natalia Rodríguez, excompañeras de la artista en la primera edición de 'Operación Triunfo'. Las fotos que ha publicado la mallorquina en su espacio personal ponen de manifiesto que la velada fue relajada y entretenida a partes iguales.
"De cenita, muy agustito con @nataliaoficial, @nuria_fergo y @giselaoficial", reza la breve pero precisa descripción con la que Chenoa resumió una noche tan especial y divertida para las tres intérpretes y sus respectivos compañeros sentimentales. Y es que, además del doctor Sánchez Encinas, en la mesa también se encontraban José Ángel Ortega, novio de Gisela, Álex Pérez, pareja de Natalia, y el actor Enrique Arce, quien a todas luces parece vivir un bonito romance con Nuria.
"Cena en muy buena compañía, quiero más como esta. ¡Las adoro, mis niñas lindas!", ha publicado por su parte Natalia al tiempo que hacía gala de ese tradicional entusiasmo que tanto la caracterizaba durante el concurso y en sus posteriores trabajos televisivos.
Según la revista Diez Minutos, la primera vez que Chenoa y Miguel Sánchez se dejaron ver públicamente juntos desde el inicio de su relación fue literalmente hace una semana, cuando los dos enamorados acudieron al teatro Nuevo Apolo de Madrid para ver la última función de la obra 'Looking for Europe', del reputado filósofo, dramaturgo e intérprete Bernard-Henri Lévy.
Independientemente del entusiasmo y la ilusión que la embargan estos días al haber entrado ya en la recta final de su segundo embarazo, la modelo Helen Lindes no ha dudado en aprovechar una ocasión tan señalada para sincerarse sobre el sinfín de problemas físicos que ha venido padeciendo últimamente y que, en sus propias palabras, han convertido su estado de gestación en "toda una odisea" a la que está deseando poner fin.
"Llevo sufriendo lumbalgia y pubalgia desde que cumplí el sexto mes de embarazo, una dolencia que suele afectar hasta al 20% de las embarazadas. Y es que justo cuando regresé de Barcelona de los desfiles de la 080 [la antigua pasarela Gaudí] noté un dolorcillo en la parte baja del abdomen y en las ingles. Al principio no le di mucha importancia y lo achaqué al estrés del desfile, el esfuerzo del viaje y los tacones", ha explicado la ex Miss España en su blog personal de la revista ¡Hola!
Aunque siempre ha llevado un estilo de vida activo y saludable, especialmente durante este embarazo y el que, en 2016, la llevó a debutar en la maternidad con el nacimiento de su primogénito Alan, ni el entrenamiento regular ni los ejercicios concretos que le propuso su instructora personal para aliviar los dolores han surtido demasiado efecto. "Se lo comenté a mi entrenadora y empezamos a hacer ejercicios concretos, pero yo solo notaba que eso iba en aumento. En pocas semanas, esa molestia se transformó en un dolor que me acompaña día y noche", ha relatado en su bitácora virtual.
Afortunadamente para la canaria, la posibilidad de "delegar" ciertas tareas de su día a día tanto en su familia como en la de su flamante esposo, el jugador de baloncesto Rudy Fernández, así como la faja que usa desde hace un tiempo para tratar de calmar la zona, han mejorado significativamente su calidad de vida. De la misma forma, Helen no ha tenido más remedio que rebajar notablemente su ritmo de trabajo para no "sobrecargar" su cuerpo y conseguir que estas últimas semanas de gestación sean tan apacibles como sea posible.
"Subir y bajar del coche, levantarme del sofá, darme la vuelta en la cama, caminar o coger a mi hijo en brazos se ha convertido en toda una odisea. Afortunadamente he podido aprender a relajarme y delegar en otras personas, aunque me cuesta muchísimo, y tanto mi familia como la de Rudy y él mismo están siendo de gran ayuda. Lo único que me calma y me ayuda es usar una faja que eleva el abdomen y me recoge bien las lumbares, pero no se debe abusar de ella", ha confesado a sus lectores antes de señalar algunos de los cambios que ha tenido que imprimir a su rutina diaria.
"A pesar de ello sigo con mi vida y mi trabajo aunque a un un ritmo mucho más pausado. Intento planificarme muy bien el día para tener tiempo de descansar y no sobrecargar mi cuerpo. Lo que no ha cambiado es mi ilusión por este embarazo, poder crear un ser dentro de mí es uno de los mayores privilegios de la vida. Nunca pensé que ser madre fuera a ser tan duro y tan gratificante a la vez, pero estoy disfrutando de cada etapa del camino", ha sentenciado con optimismo.
